Veo azulejos por todas partes. Y ahora diréis que es normal, que en toda construcción medianamente moderna, tiene azulejos, pavimentos, o revestimientos… Pero yo es que llega un punto que hasta duermo con catálogos de azulejos y sueño con ellos. La decisión ante tan banal material, que hace que te pienses que elegir, ya que lo vas a ver en la cocina o en el cuarto de baño durante toda la vida (30 años, según Tere). Sueño con azulejos azules y blancos en el cuarto de baño, estoy yo en él, sentado, haciendo lo que toda persona hace sentada en un cuarto de baño… leer las etiquetas del champú. Y es cuando empiezan a hablarme unas caras sonrientes y otras llorosas, diciendo que no están a gusto en mi cuarto de baño. Los azulejos que están mas arriba amenazan con dejar de existir suicidándose y rompiéndose contra los que están abajo, los cuales les animan con risas, ya que estos están acostumbrados a que los pisotean.
A todo esto yo intento salir por la puerta y cuando salgo de la puerta, me encuentro en la cocina (es que esta una enfrente de la otra). Y aquí es donde el armario (si señores, un armario) me pega con una de sus puertas en toda la cara, diciéndome que a que mala hora le puse al lado de la ventana, que allí estaba cogiendo frío. El microondas y el horno los cuales están juntos, empiezan a abrirse y cerrarse, diciendo que porque los puse juntos si se llevan mal, y porque el microondas era igual de grande que el horno, y porque el horno tenia que ser igual de pequeño que el microondas. Y al final se ponen de acuerdo y empiezan al unísono diciendo que a que mala hora se les puso tan lejos de la vitrocerámica. La nevera no para de decir que se siente cansada de estar en ese rincón, y el lavadero en si empieza a decir que el solo se bastaba, que no hacía falta unirlo con la cocina para que esta pareciera mas grande.
Al final despierto en la cama, con Tere al lado, con unas gotas de sudor corriendo por mi frente y viendo como Tere sueña que esta peleando con la cama. Me quedo más tranquilo que todos tenemos nuestra batalla personal con nuestros pensamientos cotidianos.
NOTA: No es un sueño real, pero es una manera de expresar mis temores en estos momentos. Que ganas tengo de elegir, pero de elegir bien y de no arrepentirme.
A todo esto yo intento salir por la puerta y cuando salgo de la puerta, me encuentro en la cocina (es que esta una enfrente de la otra). Y aquí es donde el armario (si señores, un armario) me pega con una de sus puertas en toda la cara, diciéndome que a que mala hora le puse al lado de la ventana, que allí estaba cogiendo frío. El microondas y el horno los cuales están juntos, empiezan a abrirse y cerrarse, diciendo que porque los puse juntos si se llevan mal, y porque el microondas era igual de grande que el horno, y porque el horno tenia que ser igual de pequeño que el microondas. Y al final se ponen de acuerdo y empiezan al unísono diciendo que a que mala hora se les puso tan lejos de la vitrocerámica. La nevera no para de decir que se siente cansada de estar en ese rincón, y el lavadero en si empieza a decir que el solo se bastaba, que no hacía falta unirlo con la cocina para que esta pareciera mas grande.
Al final despierto en la cama, con Tere al lado, con unas gotas de sudor corriendo por mi frente y viendo como Tere sueña que esta peleando con la cama. Me quedo más tranquilo que todos tenemos nuestra batalla personal con nuestros pensamientos cotidianos.
NOTA: No es un sueño real, pero es una manera de expresar mis temores en estos momentos. Que ganas tengo de elegir, pero de elegir bien y de no arrepentirme.
Si sabe por qué sueño yo también con azulejos, marcos de cuadros, decoración....escríbame a mfa74portugal@hotmail.com quiero una explicación que me convenza no le pienso escuchar como sea seguidor de los psicoanalíticos quiero algo que sean sus ideas no las de ese gilipollas cocainómano llamado Segismundo Freud.
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